SEÑALES (Cuento)

 




SEÑALES (Cuento)

En un pueblo pequeño no hay mucho trabajo para los detectives, por lo que estos son enviados de las ciudades cercanas cuando se presenta algún hecho que altere la normalidad de estos lugares. Un día, después de un par de desapariciones extrañas en el pueblo, le encargaron al detective Martínez resolver estos casos. Las dos desapariciones habían ocurrido de formas muy parecidas, las dos personas habían salido más tarde de lo normal de trabajar en el campo y de regreso al pueblo por un camino de piedras que de noche solo alumbra la luna se habían esfumado, dejando solo sus pertenencias y sus caballos, lo que descartaba un robo.

Después de varios días de investigación donde fue poca la información que se consiguió, se presentó una nueva desaparición. Una noche antes de que la tercera persona se perdiera, el detective Martínez tuvo un sueño muy raro en el que vio a la persona desaparecida en un lugar muy oscuro y cuando intentó acercarse se dio cuenta de que no podía moverse. En ese momento lo tomó solo como un mal sueño, pero con el pasar del tiempo se dio cuenta de que estaba equivocado. Esta nueva desaparición fue igual a la anteriores, el mismo camino, casi a la misma hora y con las mismas pertenencias abandonadas a un costado del camino.

En las siguientes semanas se presentaron más desapariciones, llegando a contar 7, pero en la cuarta fue que el detective Martínez notó algo muy raro. Su sueño se había repetido, pero ahora con la nueva persona perdida, Martínez pensaba que este podía ser el camino para resolver el misterio, pero no podía presentar sus sueños como evidencias ante sus superiores. Pasando los días los sucesos se mantuvieron, hasta llegar a 13 desapariciones, ahí se detuvieron, durante todas las que presenció en el pueblo sus sueños fueron recurrentes.

Desde la ciudad decidieron relevar ha Martínez de su puesto por no dar resultados, en su ultima noche en el pueblo tuvo el sueño más raro de todos ya que en este se pudo ver a él mismo en la habitación oscura, esa mañana se levantó agitado y después de meditar mientras empacaba las maletas llegó a la conclusión de que esta pesadilla fue debido a su estrés por no hacer bien su trabajo, al anochecer partió rumbo a la ciudad, lastimosamente nunca llegó.

 

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